
La emoción de planificar atuendos para un viaje siempre ha sido mi fuente de inspiración. Este verano, en lugar de dirigirnos hacia las cálidas playas, decidimos explorar el norte de España, ¡la hermosa región de Asturias! Nuestros días se llenaron de paseos relajados por la encantadora ciudad de Oviedo explorando los monumentos prerrománicos que adornan la región.

En uno de esos días, opté por llevar un conjunto que reflejara la frescura y la elegancia de la zona. La combinación de blanco y verde se convirtió en mi elección, una mezcla de colores que captura la esencia misma de este entorno natural y que, al vestirlo sería una experiencia refrescante y estilizada.

Por supuesto, en cualquier viaje de verano, los pantalones cortos son esenciales. Personalmente, busco aquellos con tejidos estructurados y cortes elegantes, lo que agrega un toque clásico a mis atuendos y me permite jugar con diferentes estilos. En este look, me permití esa libertad al combinar un pantalón corto con un blazer blanco que abrigaba un top de espalda descubierta, un contraste entre lo formal y lo casual que le dio ese toque de elegancia.
Otro de los puntos destacados de este atuendo fueron los fabulosos flats de piel tejida de Giosseppo. Su delicadeza añadió sutileza al conjunto, contrastado con el diseño de camuflaje de los pantalones cortos. En definitiva, se ha visto el resultado de mi pasión por combinar piezas clásicas con toques informales, creando un equilibrio que es a la vez sofisticado y accesible.

Así que, si estás planeando un viaje que irradie glamour, considera este estilo fresco y elegante, y es la esencia de una vestimenta bien equilibrada.
